Pensando en positivo.

Dar un giro al enfoque tradicional de la salud pública con respecto a la prevención, centrándose en los activos positivos, en los factores que propician que las familias y las comunidades mejoren y aumenten el control de su salud, han sido los objetivos del Seminario Avanzado sobre Promoción de la Salud. Experiencias en Andalucía y Europa, celebrado en Granada de la mano de la Consejería de Salud de Andalucía.

"Uno de los objetivos era trabajar con el personal de la Consejería de Salud en los dispositivos de coordinación de atención primaria para que relativicen sus activos de salud orientándolos hacia la perspectiva positiva", declaró uno de los ponentes, Mariano Hernán, de la Escuela Andaluza de Salud Pública. "No hemos trabajado sobre el riesgo para la salud, que es el modelo tradicional y el que prevalece todavía, sino sobre cuáles son las ventajas que poseemos y, así, enseñar a las personas a mantenerla. Hay que tener en cuenta que la mayoría de las personas están sanas".

Este ámbito de actuación no está muy desarrollado en España, hay poca experiencia y escasos estudios. Sin embargo, se puede hablar de algún factor que ayude a responder por qué se tiende más o menos a mantener una buena salud. En palabras de Hernán, "las familias democráticas, con normas, en las que se establecen límites y en las que existe una vía de comunicación fuerte, favorecen que las personas no se inicien en determinadas actividades, como pueden ser el consumo de tabaco o de alcohol, o que lo hagan a edades más avanzadas".

A pesar de los pocos estudios que se han desarrollado al respecto, se pueden nombrar algunos que lideran esta línea de investigación. "En la Comunidad Valenciana se ha elaborado el Proyecto Riu, que trata de constituir y capacitar a un grupo de mujeres de distintas culturas como Agentes de Salud de Base Comunitaria para que lleven a cabo acciones de promoción de la salud y prevención de enfermedad", señaló Hernán. En Asturias, de la mano de Rafael Cofiño, jefe de Servicio de Salud Poblacional y uno de los ponentes del seminario, se ha creado un mapa epidemiológico para que sirva como base en el estudio de los activos positivos de la salud. Pero, en este ámbito, "Andalucía es la comunidad autónoma que está más avanzada, pues ya disponen de leyes y borradores que orientan los programas de salud positiva, exponiendo como elementos autogénicos, entre otros, la dieta, el clima e incluso el baile", añadió Hernán.

La promoción en Europa

En el seminario también se expusieron expriencias europeas, más concretamente de los países nórdicos y del Reino Unido, de la mano de Bengt Lindström, del Centro de Investigación Folkhälsan, en Finlandia, y de Anthony Morgan, del Instituto de Salud y Excelencia Clínica de Reino Unido. "Los países nórdicos están mucho más avanzados en promoción de la salud que nosotros. Tienen unas técnicas y un modelo que llevan utilizando desde hace años y que es el que queremos utilizar aquí, en España, pero adaptándolo a nuestra realidad", explicó Hernán. "Tratamos de exlicar cómo la salud puede ser vista como un recurso activo para el desarrollo de la vida, centrándonos en los adolescentes, pues el contexto escolar es el más factible para trabajar sobre esto", explica Lindström.

Muchas de las diferencias que podemos encontrar entre los países nórdicos y España responden a cuestiones culturales. Por ejemplo, aunque este seminario no haya tratado la cuestión del tabaquismo y la ingesta de alcohol, "en Suecia y Finlandia se han adoptado medidas jurídicas y prácticas muy restrictivas para reducir el consumo de estas sustancias. Sin embargo, España produce una gran cantidad de tabaco y tiene una tradición de su consumo importante, como todos los países mediterráneos. Por el contrario, Dinamarca y Finlandia son los países que ingieren más alcohol de Europa", afirmó Lindström.

La dieta como un activo positivo


En cuanto a la dieta, "los jóvenes tienen toda la información que necesitan, aunque podríamos tener mejores formas para hacer que la gente joven entienda el valor de una buena dieta. De hecho, hemos puesto en marcha un nuevo concepto de 'aprendizaje saludable' teniendo en cuenta los métodos que se aplican en la cultura juvenil y sus valores para tener éxito. Además, no hay que olvidar que la publicidad tiene un efecto de sensibilización a corto plazo. En España existe una cultura gastronómica que es favorable, pero aún así los jóvenes siguen comiendo muchas grasas", declaró Lindström.

Pese a que prevalezca el modelo de riesgo sobre el de activos positivos para la salud, "existe un nexo común entre ambos, entre ver qué factores cotidianos nos ayudan a mantener la salud y qué no debemos hacer para perderla; de hecho, al estudiar el mapa epidemiológico se pueden complementar. Por ejemplo, hay personas que están enfermas y que progresan gracias a los dos modelos", asegura Hernán.

Via: diariomedico.com

Las Comunidades Autónomas con más seguros privados cuestan menos al SNS

Las comunidades autónomas en las que más de un 25 por ciento de la población tiene seguro sanitario privado son las regiones que menos gasto público por persona generan, según datos del IDIS, que defiende por ello los incentivos fiscales a la contratación de seguros.

El Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (IDIS), que aglutina a hospitales privados y aseguradoras, ha hecho públicos los datos de penetración de los seguros sanitarios en las diferentes autonomías y ha concluido que las regiones con mayor porcentaje de población con doble aseguramiento (público y privado) son las que menor gasto público sanitario presentan.

Dicho de otro modo, la sanidad privada ahorra recursos al sistema público, concretamente, una media de 1.500 euros por persona y año, según los cálculos del IDIS.Los datos muestran que autonomías como Madrid y Baleares, en las que el porcentaje de personas con seguro privado supera el 25 por ciento de la población total, figuran a la cola en gasto público per capita, con 1.103 y 1.003 euros por persona y año, respectivamente.Del mismo modo, regiones como Extremadura o Asturias, en las que apenas el 10 por ciento de la población ha optado por contratar un seguro privado, se sitúan entre las comunidades en las que el esfuerzo presupuestario público en Sanidad es mayor, con un gasto per cápita de 1.390 y 1.495 euros, respectivamente.

Las conclusiones del IDIS, que ligan el mayor porcentaje de seguros privados con el menor gasto público se cumplen para buena parte de las autonomías, si bien en casos como el de Aragón se observa un aseguramiento privado alto (del 20 por ciento) y, a la vez, un gasto sanitario per capita superior a la media española, y en Valencia, por el contrario, se registra un gasto público por debajo de la media y un aseguramiento privado también bajo, lo que sugiere que otros factores como la propia eficacia en la gestión o las características sociodemográficas estarían influyendo también en el mayor o menor gasto sanitario público.

Según Juan Abarca Cidón, secretario general el IDIS, lo que ponen de manifiesto estos datos es que "la planificación del sistema sanitario debería contar con la totalidad de los recursos, públicos y privados, aprovechando y potenciando así el esfuerzo de los usuarios del sistema privado que pagan un complemento por su salud". En este sentido Abarca Cidón insiste en que "la promoción del seguro privado con iniciativas como la desgravación fiscal contribuiría a descargar económicamente al sistema público".

Via: diariomedico.com