El mundo del fútbol toma medidas de prevención contra la muerte súbita


La muerte de Antonio Puerta, del Sevilla, sacó a la luz el riesgo de las arritmias entre los jugadores. Este problema ha sido tratado en el I Simposio Prevención en el Fútbol, celebrado en el Hospital Clínico de Madrid. El gran impacto de las muertes de futbolistas profesionales en el terreno de juego a causa de arritmias ha llevado a todos los estamentos del fútbol a querer poner coto a estos fallecimientos.

"Para mejorar la atención en los terrenos de juego hemos creado el maletín de emergencias -que debe estar en todos los campos de primera y segunda división- y que ofrece apoyo para la atención cardiocirculatoria urgente", ha explicado José María Villalón, director de los Servicios Médicos del Atlético de Madrid. "Los médicos de los equipos ya conocen la existencia de este maletín.

Además, la Unión de Federaciones de Fútbol Europeas (UEFA) ha elaborado un listado de pruebas obligatorias que deben superar los jugadores antes de competir, entre las que se encuentra el electrocardiograma (ECG) basal y de esfuerzo, estudio ecocardiográfico y analíticas para determinar el nivel de colesterol".

Antonio López Farré, coordinador de Investigación del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, cree que con el ECG, la ecocardiografía y la prueba de esfuerzo se pueden detectar gran parte de los sujetos con riesgo, aunque "existen arritmias, muy asociadas a los genes, que se detectan mediante análisis genéticos, como el síndrome de QT largo, el de Brugada o la hiperplasia arritmogénica".

En la actualidad sólo el Atlético de Madrid está realizando estas pruebas genéticas a sus jugadores en la Unidad de Diagnóstico Genético Cardiovascular del Hospital Clínico. "Varios clubs han mostrado interés en esta clase de estudios, aunque ninguno, excepto el Atlético de Madrid, ha concretado nada", explica López Farré, que cree que poco a poco estas pruebas se irán generalizando.

Ignacio Pujol, intensivista de los servicios médicos del Atlético de Madrid, pidió una normalización mayor en las pruebas exigidas a cada deportista, porque "en la normalización está la exigencia".

También ha notado que desde casos como el de Antonio Puerta, tanto técnicos como jugadores están mucho más concienciados: "Este año han sido los propios jugadores los que nos han pedido que les demos una charla sobre este tema". De todos modos, Pujol insiste en que aún queda mucho camino por recorrer: "Igual que una corrida de toros no se celebra si no está disponible una UVI móvil y un cirujano, un partido de fútbol no debería celebrarse sin que se encuentre disponible un médico formado en atención en paradas cardiorrespiratorias".

Niños
Las labores preventivas en el terreno profesional están comenzando a calar. Sin embargo, no sucede lo mismo en el mundo del fútbol de aficionados: "Muchos futbolistas llegan a la Ciudad Deportiva del Real Madrid con 18 años sin haber pasado ningún tipo de reconocimiento médico durante toda su carrera", ha dicho Antonio Acedo, que trabaja con las categorías inferiores del Real Madrid. "En nuestro equipo las pruebas que se realizan a los niños de categorías inferiores son similares a las del primer equipo: ECG anual, ecocardiografía a partir de 15 años y prueba de esfuerzo". Desde el suceso de Puerta, Acedo ha observado un cambio de mentalidad entre jugadores y directivos de equipos: "Antes había que andar detrás del deportista; ahora, son ellos los que piden las pruebas y en Valdevebas hemos conseguido que haya tantos desfibriladores como extintores".