La masificación de las consultas pone en riesgo la salud de los pacientes, según un informe de la Organización Médica Colegial.

Madrid (22-02-08).- La Comisión Central de Deontología del Consejo General de Colegios de Médicos ha aprobado una declaración sobre “Tiempos mínimos en las consultas médicas”, una condición indispensable para que se pueda prestar a los ciudadanos una atención sanitaria digna, según se recoge en el comunicado emitido.

Esta comisión asume que, en el ejercicio de su responsabilidad, debe hacer llegar estas consideraciones a la población general, a los profesionales sanitarios y sobre todo a las Autoridades Sanitarias que son, en última instancia, las que deben facilitar las condiciones necesarias para que los médicos puedan trabajar con garantías de calidad asistencial.

Entienden que sin disponer de tiempo suficiente no se puede prestar una atención sanitaria tal como exige la ética profesional y la legislación, y por ello se debe reclamar el tiempo necesario para prestar la atención médica como un deber deontológico y un derecho profesional irrenunciable.

“En los últimos años se ha producido en España una progresiva masificación de las consultas médicas, que se ha traducido en una disminución de los tiempos de atención a los pacientes, con un serio riesgo para la calidad asistencial y, por consiguiente, para la salud de los pacientes”, según fuentes de la OMC

Según comenta, se suele hacer alarde de un sistema sanitario de alta eficiencia pero se deja de explicar que es a costa de mantener a los médicos en una situación de tensión y precariedad, “y es responsabilidad de las Autoridades Sanitarias proporcionar los mecanismos necesarios para que los médicos puedan trabajar con seguridad, para lo que se requiere una serie de medios razonables pero, sobre todo, del necesario tiempo de consulta”, afirma la OMC.

La emblemática reivindicación de al menos “10 minutos” por paciente, para las consultas de Atención Primaria, es una buena referencia para señalar un “mínimo decente” pues el sentido común ya indica que por debajo de este tiempo no se puede plantear una entrevista clínica y una exploración física en condiciones dignas. Por tanto no es aceptable que se organicen agendas asistenciales con asignación de un tiempo menor.

En este sentido reclaman que el tiempo necesario para cada acto médico debe ser fijado por el criterio profesional del médico, quien lo establecerá en función de las necesidades individuales de cada paciente, pero sobre la base de un tiempo “mínimo decente” como límite infranqueable.

En la rueda de prensa para presentar el documento han intervenido Juan José Rodríguez Sendín, secretario general de la OMC, Cosme Naveda, presidente del Colegio de Médicos de Vizcaya, y Rogelio Altisent, presidente de la Comisión Central de Deontología. Tal como concluye esta declaración, los Colegios de Médicos “redoblarán sus esfuerzos en el ejercicio de la responsabilidad que les corresponde en el ordenamiento de la profesión ante las situaciones de masificación asistencial que amenazan la calidad de la asistencia, con especial repercusión en los grupos más vulnerables de la sociedad”.


Digo yo: la masificación no es el problema, el problema es como sufragar los gastos ocasionados por la masificación en un sitema sanitario público. En la medicina privada se vería este asunto no como un problema, sino todo lo contrario. Ojalá que se masifiquen mi consulta y todas las clínicas privadas.